FUENTE: Blog Anaya Infantil y Juvenil
Tres historias de miedo componen este libro que nos harán temblar mientras nos sumergimos en sus oscuros ambientes. Un cementerio, un hostal y una vieja casona serán los escenarios de estos relatos que nos acelerarán el corazón y harán que nos giremos inquietos cuando creamos ver una sombra a nuestra espalda.Entrevista con las autoras:
—Concha López Narváez es un referente de la literatura infantil española. Esta vez se ha unido a su hija María para traernos estos relatos. Dígannos, ¿cómo han planteado la escritura a cuatro manos y qué les ha parecido la experiencia?
—La aventura empezó casi por casualidad, hablando una tarde de cierta noticia inquietante que a Concha le parecía adecuada para un relato de terror. María dejó volar la imaginación y de pronto nos encontramos fabulando juntas, y la historia fue tomando vida. A medio camino no sabíamos a cuál de las dos pertenecía, así que decidimos ser coautoras y seguir adelante en una misma dirección. La experiencia ha resultado muy gratificante y positiva, hasta tal punto que pensamos repetir.
—La aventura empezó casi por casualidad, hablando una tarde de cierta noticia inquietante que a Concha le parecía adecuada para un relato de terror. María dejó volar la imaginación y de pronto nos encontramos fabulando juntas, y la historia fue tomando vida. A medio camino no sabíamos a cuál de las dos pertenecía, así que decidimos ser coautoras y seguir adelante en una misma dirección. La experiencia ha resultado muy gratificante y positiva, hasta tal punto que pensamos repetir.
—¿Por qué se han decidido a escribir relatos de miedo?
—A nosotras nos gustan, y pensamos que los miedos literarios sirven para ahuyentar a los reales.
—A nosotras nos gustan, y pensamos que los miedos literarios sirven para ahuyentar a los reales.
—¿Consideran sus relatos influenciados por algún escritor u obra en particular?
—Seguramente, desde nuestro subconsciente, aflora algo de Poe y Lovecraft, aunque procuramos que nuestra literatura, tanto en la forma como en el fondo, sea independiente y personal.
—Seguramente, desde nuestro subconsciente, aflora algo de Poe y Lovecraft, aunque procuramos que nuestra literatura, tanto en la forma como en el fondo, sea independiente y personal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario